miércoles, 21 de diciembre de 2011

Giotto



Giotto detalle de la pintura de Paolo Uccello
Cinco Maestros del Renacimiento Florentino (o Padres de la Perspectiva)


Ante el narcicismo exacerbado que impera en el mundo de las artes visuales, junto con la falta de talento y oficio de las tendencias de vanguardia, conviene reflexionar acerca de los humildes orígenes de este gran artista del trecento italiano que cambió para siempre la historia del arte.

Bien dice el dicho "Los laureles crecen entre la ceniza" y efectivamente así fue. Giotto nació alrededor de 1267 en Vespignano, una aldea en las afueras de Florencia, hijo de un labrador llamado Bondone; durante su niñéz Giotto fue un pastorcito que cuidaba las ovejas de su padre e impulsado por su instinto natural dibujaba mucho, pero no como hacen los niños de ahora, él era tan pobre que no tenía lápices ni papel, así que dibujaba con una ramita sobre la tierra o con piedras afiladas.
Giorgio Vasari "El Padre de la Historia Moderna del Arte" nos cuenta que cierto día el pintor Cimabue quien era el artista más destacado en el arte bizantino, iba camino a Florencia y vió al pequeño Giotto dibujando a una de sus ovejas del natural, el gran Cimabue quedó muy sorprendido ante el evidente talento del pastorcito y lo invitó a ser su discípulo con la autorización de su padre; entonces la costumbre era que los alumnos vivían en la casa de sus maestros.

En pocos años Giotto aprendió bien el estilo de su maestro y lo superó, creando una revolución en la pintura que más tarde sería alabada por artistas como Miguel Ángel y Leonardo Da Vinci entre otros.
El introdujo la prática de retratar a las personas del natural, cosa que no se hacía desde hace siglos, los principios de la perspectiva y la tridimensionalidad.

Dante Alighieri fue gran amigo de Giotto y escribe acerca de él en la Divina Comedia en el Canto XI del Purgatorio: "¡Oh vana gloria del poder humano! ¡Cuan poco subsistes! Creíase que Cimabue era el señor de la pintura, ahora Giotto se levanta triunfante y la fama de su maestro es hoy obscura". También Boccaccio nos asegura en su Decamerón: "La pintura de Giotto es de tan excelente calidad que cuantos la miran la confunden con la realidad".

Vasari describe a Giotto como "No menos buen cristiano que buen pintor" muy alegre, ingenioso, aplicado al estudio e incluso bromista. "Por gracia de Dios y ayudado por la naturaleza Giotto resucitó a través del dibujo ese arte que se había perdido en aquella época grosera e incapáz, llena de artífices incompetentes".

Entre sus obras más hermosas se encuentran: El ciclo de frescos de la Basílica de San Francisco en Asís, El ciclo de frescos de la Capilla de los Scrovegni, El crucifijo de Santa María Novella, la Madonna Ognissanti, el Políptico Stefaneschi y el Baroncelli, el Mosaico de la Navicella, etc.

El poeta Francesco Petrarca menciona en su testamento una pintura al temple de la Virgen María de Giotto que le era muy querida.




Finalmente aquel pastorcito que dibujaba con humildad en la tierra hizo magníficas pinturas y retablos con fondos de oro sobre la vida de Nuestro Señor y los Santos.
Giotto murió en el año de 1336, sus obras han fascinado a la humanidad por más de 700 años; de modo especial mencionaré el fresco donde San Francisco de Asís se desposa con la Pobreza.

Salve Regina

Pedro Sacristán
Artista Plástico




* Las imagenes utilizadas en esta entrada las obtuve en internet.

domingo, 27 de noviembre de 2011

Arte Medieval

 
 
 
La Sala de Arte Gótico pertenece a la Colección Permanente del Museo Nacional de San Carlos, que está ubicado en el que alguna vez fuera El Palacio del Conde de Buenavista, cuya construcción se le atribuye al arquitecto Manuel Tolsá.
La exposición está compuesta por 13 tablas y retablos que datan de los siglos XV y XVI, de procedencia española y flamenca (Flandes - actual Bélgica - fue una colonia del Imperio Español durante el siglo XVI) por lo tanto, puede decirse que todas las piezas de la sala son españolas.

La Edad Media abarca un periódo aproximado de 1000 años, que va desde el siglo V al XV; siendo el arte de los siglos XIV y XV un puente de transición entre el Medievo y El Renacimiento; también se le considera como Gótico Tardío ó Gótico Internacional. Este estilo ha recibido nombres tales como: Estilo Suave y Estilo Hermoso menciona Anna Eörsi en su libro International Gothic Style in Painting.
El Arte Medieval es, casi en su totalidad, Arte Sacro; por lo que las pinturas tienen como único fin la catequésis y despertar la devoción del espectador, cabe señalar que en aquel entonces no todos sabían leer y escribir; por lo que se consideraba a la pintura como "La Biblia de los Pobres".
El Arte Sacro habla de una realidad espiritual, no trata de hacer representaciones realistas como se hacen en los retratos; es rico en simbolismo e incluso me atrevo a calificarlo de "poético".
La pieza que da la bienvenida a los visitantes es el Vir Dolorum (Varón de Dolores) se trata de una pequeña pintura al temple y óleo sobre tabla, en la que se muestra el sufrimiento de Cristo en su Pasión; a su izquierda y derecha los ángeles sostienen la lanza, los clavos y la esponja, símbolos de la crucifixón. En la pintura de éste periódo se utilizaban los fondos dorados para simbolizar la Omnipresencia de Dios.
 


 
Más adelante se encuentran dos Predelas de Jaume Goncalbo (la parte inferior de un retablo o banca de retablo) en la primera: San Jorge y el Dragón, El Camino a Damasco (la conversión de Saulo) y El Varón de Dolores: En ésta última se identifican los rasgos del estilo: los fondos dorados, la perspectiva jerárquica, la abundancia de símbolos, por ejemplo: "El Manto de la Verónica" que alude al Via Crucis, el gallo que representa la triple negación de Pedro, los clavos, la escalera, el flagelo, etc.
A los lados están San Juan y La Virgen María, justo como se ven en las escenas de la Crucifixión, que representan a la Iglesia y el Ministerio Ordenado; tanto la túnica de Jesús, de la Virgen y de los Santos han sido pintadas con gran delicadeza, precisamente se considera que los artistas del Gótico eran verdaderos especialistas en el trabajo de los pliegues, de ahí el nombre: Estilo Suave y Hermoso.



El Retablo de la Encarnación de Pere Espallargues ocupa el fondo de la sala y en él se muestran diversas escenas de la Vida de Jesús y los Santos. Éste retablo está compuesto por 11 tablas pintadas al temple y óleo; los retablos se leen de la siguiente forma: de arriba hacia abajo y de izquierda a derecha, las divisiones verticales se llaman Calles y las horizontales Cuerpos.
En esta sala se exhiben verdaderas joyas que han logrado sobrevivir 5 siglos y están ahí, para ser apreciadas y disfrutadas por todo el público.
 

 
 
Los invito a visitar la Colección Permanente del Museo Nacional de San Carlos
Calle: Puente de Alvarado No. 50 Col. Tabacalera.
Abierto de Lunes a Domingo de 10:30 AM. a 6:00 PM.
Cerrado el Martes.
 
 
Pedro Sacristán
Artista Plástico


 

domingo, 11 de septiembre de 2011

Todos los Colores del Amanecer


Mi última Acuarela:



"Todos los Colores del Amanecer"
Acuarela
Pedro N. Sacristán
2011.


Este es un Técpatl, cuchillo de pedernal utilizado por los mexicas para el sacrificio humano.
Aquí corta el cielo y divide la noche del amanecer, en la parte de abajo se encuentra Tenochtitlán, la antigua Ciudad de México, el chorro de sangre sale (o cae) sobre el recinto ceremonial de la ciudad.




Tenochtitlán - detalle
Atrás se ven los volcanes, "El Popocatépetl" y "El Iztaccíhuatl", arriba de ellos la Vía Lactea y finalmente todos los colores del amanecer se reflejan en el Técpatl.




Vía Láctea - detalle
   


Pedro Sacristán
Artista Plástico






sábado, 30 de abril de 2011

Flor y Canto

  

Decoración para el cirio pascual 2011.


"Flor y Canto" (In xóchitl, in cuícatl) es una expresión prehispánica que era y es utilizada para designar todo aquello que es sublime, también se le llama de esta forma al arte de la poesía, este es el tema de la decoración para el cirio pascual 2011; que ha sido elaborada con repujado en metal pintado con acrílico y consta de cinco partes: el anillo superior, la cruz, el anillo inferior, alfa y omega. Las piezas han tomado como fuente de inspiración la iconografía de la imagen de la Virgen de Guadalupe y el Salmo 148, y han sido decoradas con símbolos en lenguaje inculturado, es decir, utilizando motivos prehispánicos en un contexto cristiano. El cirio se lee de abajo hacia arriba en el siguiente orden: Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo.




"Rosa"
Práctica de repujado en metal para "Flor y Canto".




"Amanecer" (detalle)
Repujado en metal.



Dibujos previos 






"Amanecer"
Dibujo previo a grabado en aluminio.





"Rosas"
Dibujo previo a grabado en aluminio y calca en rojo.



Repujado en metal 






"Amanecer"
Repujado en metal.





"Rosas"
Repujado en metal.





"Noche y Día" y "Amanecer"
Repujado en metal.


 

"Flor y Canto"
Repujado en metal.


Pintura





"Rosas"
Repujado en metal pintado con acrílico.



El anillo inferior simboliza la Pasión de Cristo; la luna negra en medio de una guirnalda de rosas rojas tiene múltiples significados, representa a la Virgen María en primer lugar, por su participación en la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo, también representa a la iglesia, el color negro expresa la oscuridad de la fe de acuerdo con el pensamiento de San Juan de la Cruz  (La Noche Oscura). Las rosas rojas con espinas representan la sangre derramada por el Cordero, la Pasión de Cristo, los mártires cristianos y también la vida del hombre en este mundo. El diseño fue inspirado en las palabras de la Madre Teresa de Calcuta: "Jesús quiso ayudarnos compartiendo nuestra vida, nuestra soledad, nuestra agonía y nuestra muerte. Todo eso lo ha tomado sobre Sí y lo ha llevado a la noche más oscura. Solo siendo uno con nosotros Él nos ha redimido".



"Cruz"
Repujado en metal pintado con acrílico.



La cruz representa la pila bautismal vista desde arriba, por ello ha sido decorada con las ondas del agua; en el centro se halla el símbolo "Nahui Ollin", es un glifo inculturado que representa a Jesucristo y se considera como una equivalencia prehispánica del antiguo símbolo cristiano "Ichthys". La cruz de agua simboliza la muerte de Jesús y la muerte del pecado (el Nahui Ollin y el Cordero se han fundido en la cruz).  "Con Cristo sois sepultados en el Bautismo..."




"Amanecer"
Repujado en metal pintado con acrílico.


Esta pieza es el anillo superior del cirio pascual y representa la Resurrección de Cristo de un modo inculturado. En el centro está la media flor multipétala en espiral, símbolo prehispánico del amanecer y del ocaso, la espiral expresa el movimiento del sol a través del cielo. De acuerdo a la iconografía náhuatl las estrellas son "Los Ojos del Cielo”,  aquí el cielo turquesa también representa "Las Ruedas de Turquesa" de los Cuatro Vivientes (los Evangelios) que están debajo del Trono de Dios en la Visión del Profeta Ezequiel (Ez 1, 1 - 28  y  10, 1 - 22). Esta obra es la síntesis de la espiritualidad mexicana: indígena y cristiana. "...con Él también habeis resucitado" (cf. col 2, 12).



"Flor y Canto" 
Cirio pascual 2011.



Los símbolos alfa y omega (principio y fin) están contenidos dentro de "Chachihuites" (el glifo que representa el jade). En el México antiguo el jade era sumamente valorado, incluso más que el oro y para los mexicas representaba la divinidad, el fuego y la perfección. La totalidad de la composición representa al Cordero y los elementos que conforman el universo como expresión de alabanza de la creación hacia Dios Todopoderoso: tierra (las rosas), agua y viento (la cruz) y fuego (el jade y el sol). Las tres virtudes teologales se encuentran contenidas en los colores de la decoración: la Fe (el color blanco del cirio), la Esperanza (el verde del anillo de turquesa) y la Caridad (las rosas rojas); siendo la llama que arde en el cirio la llama del amor que está por encima de todas las virtudes. La decoración del cirio también corresponde a las palabras del Papa Benedicto XVI en el mensaje de Cuaresma de 2011.

"Que yo pueda conocerle a Él, el poder de Su Resurrección y la Comunión con Sus Padecimientos, hasta hacerme semejante a Él en Su Muerte, tratando de llegar a Su Resurrección de entre los muertos" (Fil. 3, 10 - 11).



Pedro Sacristán
Artista Plástico